Textos

Cucaracha de reflexiones o reflexiones de cucaracha

Por Christophorus Robin*

 

Sucedía cada cierto tiempo y, como las vacas de rancho que pastaban en la llanura, estaban manchadas. Más y más manchadas conforme seguía la lectura. Conforme pasaban los vientos. Eran lunares frutales en una danza de moscas sobre montañas de fetos de aves consumidas. Eran cadáveres repletos de pétalos de pelusa en crisoles de bacterias que arden en un horno invisible. Pequeña pequeña vida. Vida pequeña pequeñisíma. Eran sobre un campo de café bebido y veracruzano. Versos del tiempo en la alacena de la cocina. Y yo estaba, y también era. El precipitado en los lunares frutales, en los cadáveres repletos, en los versos del viento. Leí, sin saber leer, una etiqueta que nombra este lugar: basura-orgánica. Suciedad con aptitud para vivir, desperdicio con capacidad para morir. Un infinito de palabras de juego que con indolencia grita y grita y grita: la muerte está viva, la vida está muerta. Sucederá cada cierto tiempo hasta que ya no haya soles, ni vacíos, ni sombras, ni verbos. Hasta el último suspiro para el último llanto. Se encendió la luz. El miedo a la muerte es lo más vivo que tenemos. Salí huyendo.

 

*Escritor egresado de Literaria Centro Mexicano de Escritores. Texto trabajado en el taller de poesía de Yendi Ramos.